Bienvenidos! Disfruten de la revista!

El Noviazgo Llorón

Por Marco Vega - adapt. Julio Cruz

¿Te ha pasado?

Utilizas el arma ultra secreta, conocida con el nombre de "lágrimas" para lograr que cumplan tu capricho. Justo en ese momento en que está decidido a cortar la relación o por decirte "NO!" a algo, lloras amargamente.

¿Por qué lo haces?

¿Para hacer sentir culpable al otro?

¿Para que no sigan discutiendo el tema, sabiendo que llevas las de perder?

¿Para causar lástima?

¿Porque esa era la forma en que conseguías las cosas cuando eras pequeño(a)?

¿Para hacerte la víctima? ¿Aunque si lloras después de una golpiza, definitivamente eres una víctima, pero no estamos hablando de eso.

Simple y sencillamente: tú quieres algo, pero no sabes cómo pedirlo. Te portas como un bebé recién nacido que no sabe hablar, sino llorar para que le den su biberón o para avisar que ya se hizo en los pañales.

OJO: Cuando se llora, se cierra la mente y se abre la llave de los ojos; pero cuando se deja de llorar, se cierra la llave de los ojos y se abre la mente.

Definitivamente, hay momentos en que llorar es apropiado: un velorio, un golpe en la espinilla, un fuerte dolor de cabeza, una sorpresa muy especial, o cuando te muerdes al mascar chicle. Pero nunca para resolver conflictos o problemas normales de las relaciones.

Si en alguna ocasión se te cumple el capricho, sentrás que están aprobando tu comportamiento, y pensarás que esa es la forma de conseguir lo que quieres. Volverás a hacerlo una y otra vez.

¿Cómo dejar de ser llorón?

  1. Piensa en lo siguiente: cuando una persona está triste, todo le parece malo e injusto; pero cuando está alegre todo le parece bien. Las lágrimas pueden empeorar una discusión.
  2. Decídete a dejar de acudir a las lágrimas como medio de escape.
  3. Trabaja con el niño que vive dentro de ti, recuerda que vas a vivir con él toda la vida, así que no permitas que él te controle, hazlo tú.
  4. No permitas que el llanto te controle, tú tienes la capacidad de controlarlo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario