Los Años Maravillosos

Cierto día, al regresar de la oficina, prendí la tele y anunciaron una serie de televisión que, cuando yo tenía la edad de algunos de ustedes, era lo máximo. Estoy hablando de "Los años maravillosos": Kevin Arnold, Winnie Cooper y Paul Pfiffer. Así que me senté en el suelo frente al televisor, como solía hacerlo cuando era más joven, pero con una pequeña garrapata de dos años a mi lado diciéndome: papá.

Cuando terminó, me recordé mis años maravillosos. ¡Ah! esos años maravillosos. ¿A poco no es verdad que la edad en la que ustedes están es lo más precioso que hay? ¿A poco no es maravilloso despertarse un día y descubrir que tu peinado o tu ropa esta fuera de moda? ¿Aún recuerdas la primera fiesta o quinceaños?

Ese día descubrimos el moco de gorila y las chicas descubren el mousse. Las chicas de cabello rizado, con bajo presupuesto, descubren otro uso muy útil para la plancha, y el día de la fiesta llegan con el cabello liso, todo para que las chicas que tienen cabello liso natrual lleguen con el cabello rizado... ¿a poco no?

Ese mismo día pasan por el drama de estar frente al ropero con 35 vestidos diferentes y surge el clásico: "¡Ach, me choca! No tengo nada que ponerme". Y luego cuando voltean hacia abajo y examinan sus 110 pares de zapatos, concluyen: "¡No puede ser!, nada combina".

Y ¿a poco no es maravilloso echarse un round con tus padres porque te dicen lo que tienes que hacer y tú nomas no quieres?

En esta edad surgen las frases celebres. Los chavos y chavas: "¡Te lo juro! No había señal" "Se me acabó el crédito" "Se acabó la batería" "Voy a hacer tarea en equipo" "Quedé de verme con mis amigos en la Biblioteca" "Lo que pasa es que no me quieren" "Es que ustedes no me comprenden" "Tus tiempos eran otros". Ah pero también están las frases celebres de los padres: "Esos amigos no me gustan" "¿Con quién andabas?" "Esto me duele más a mi que a ti" "Cuidadito y me entero que tienes novio" "Te lo digo por tu bien" "¿Como puedes vivir en medio de este tiradero?" "¿Así vas a ir?" "Levanta la ropa sucia" "Ponte otra cosa, hasta parece que no tuvieras más ropa"... Ah, pero la clásica es: "Cuando tengas tus hijos me comprenderás".. o mejor dicho: "Como me ves te verás".

Aun recuerdo a mis padres reprochándome: "Te lo dijimos", cada vez que hacia algo que me habían dicho que no hiciera. Pero, ¿de qué sirve ser adolescente si no es para "probar" mis propias decisiones, o hacer las cosas sin importar las consecuencias?... Si eso me dijeron y también lo creí hasta que me topé con las consecuencias de algunas de mis acciones imprudentes, y a sufrir se ha dicho.

Descubrí poco a poco que los consejos de mamá y papá no son para "fastidiarme la vida", o "porque no me quieren" y todas las demás frases del repertorio de todo adolescente. Descubrí que los consejos eran porque querían protegerme... ¿Cómo lo sé? Porque ahora soy papá (¡sí! como me ves te verás) jajaja ahora comprendo el dolor y sufrimiento que hay en tan solo pensar que alguna de mis hijas pueda ser lastimada. ¡¡¡Siiii! ¡¡¡como me ves te verás!!!

Moraleja
De esos años maravillosos, mi papá obtuvo algo de su Padre (mi abuelito), una frase que canta: "Como me ves te verás"... y a su hijo amado (osease yo), le cantó la misma frase... y ¿qué creen?, ahora yo soy padre, y ya estoy comenzando a guardar un excelente repertorio de frases y consejos para mis hijas, pero dentro de ellos no podrá faltar: "Como me ves te verás". Chicos, no desprecien los consejos de sus padres, porque también fueron adolescentes, y saben por lo que están pasando. Presten atención a sus palabras siempre (Proverbios 4:1-4).